Los cocodrilos actuales (Crocodylinae) forman parte de un grupo bastante reciente, geológicamente hablando, y pueden atrapar a las presas en el agua sin “ahogarse” porque cierran su glotis al bucear. Pero esto no siempre fue así, lo sabemos gracias al estudio de varios cráneos fosilizados.
Muchas especies de crocodiliformes convivieron con los dinosaurios, pues ambos grupos se originaron casi al mismo tiempo, hace unos 230 millones de años.
Los primeros crocodiliformes eran especies terrestres, pequeñas, ágiles y veloces. A principios del Jurásico, el registro fósil evidencia adaptaciones marinas y una gran diversificación de linajes. Posteriormente existieron crocodiliformes de tamaño enorme, incluso semejante al de algunos dinosaurios, como es el caso de Sarcosuchus imperator.
Vamos a presentarte una nueva especie de crocodiliforme del Cretácico Temprano hallada en Galve, Teruel. Este “cocodrilo” de agua dulce surcaba los canales de lo que era una llanura de inundación aluvial.
Música Kevin MacLeod, sujeta a una licencia de Creative Commons Attribution (https://creativecommons.org/licenses/by/4.0/